Las principales empresas proveedoras de servicios de compra y venta de criptoactivos en la Argentina pidieron un marco regulatorio local, que legisle las condiciones de operación y acceso a un mercado que, actualmente, no cuenta con el respaldo ni del Banco Central (BCRA) ni de la Comisión Nacional de Valores (CNV), informó la Agencia de Noticias Télam.
Si bien operar con criptoactivos en la Argentina no es ilegal, las autoridades regulatorias señalaron que invertir en éstos es una decisión de alto riesgo, ante la volatilidad en su precio y la ausencia de resguardos de fondos y seguridad informática que provee la actual legislación.
Por ese motivo, las plataformas dedicadas al intercambio, negociación y custodia de criptoactivos mostraron su interés de avanzar en forma conjunta con legisladores y demás autoridades para alcanzar una normativa que potencie los beneficios de la tecnología y, a la vez, lleve tranquilidad a sus actuales usuarios.
«Es importante la seguridad. Tenemos que colaborar con el regulador para que la industria siga creciendo y haya cada vez más adopción», afirmó Andrés Ondarra, Country Manager de Bitso, la plataforma de pagos con criptomonedas más grande del país, en un encuentro virtual organizado por la Cámara Argentina de Fintech.
Si bien la CNV y el BCRA sostienen que los criptoactivos no tienen niveles significativos de aceptación y utilización, fuentes del sector privado aseguraron a Télam que cerca de un millón de personas tiene cuentas activas para operarlos en el país.
Al respecto, una encuesta reciente encargada por la empresa Mastercard a población adulta reveló que, en la Argentina, el 35% planea usar criptomonedas en el futuro, mientras que el 83% de los menores de 35 años dijo querer aprender más sobre las criptomonedas.
«El primer punto es que sea más sencillo entrar. Se está trabajando mucho pero quedan dudas de los usuarios sobre impuestos e incertidumbre porque la comunicación por parte de los reguladores no es clara», apuntó Maximiliano Hinz, director de Operaciones para Latinoamérica de Binance, principal exchange de criptomonedas a nivel mundial.
«Necesitamos que los reguladores estén de nuestro lado y nos ayuden. Si la adopción de cripto es algo que está pasando, por eso no tiene sentido poner barreras de acceso«, agregó.
Esta semana el BCRA y la CNV emitieron un comunicado conjunto en el que señalaron que, si bien la tecnología subyacente de las criptomonedas podría contribuir a promover a futuro mayor eficiencia e innovación financiera, «los criptoactivos no son dinero de curso legal», ya que no tienen respaldo de autoridades gubernamentales, y que «presentan riesgos y desafíos para sus usuarios, inversores y para el sistema financiero en su conjunto».
En ese sentido, alertaron a los usuarios sobre la elevada volatilidad de su precio, la posibilidad de pérdida de inversión por ciberataques a las plataformas de intercambio, una ausencia de salvaguardas en la regulación vigente para su custodia y la falta de transparencia en la información ante la limitada capacidad que existe para su monitoreo y análisis, lo cual puede dar lugar a incumplimientos de estándares internacionales en materia de prevención del lavado de activos.
Semanas atrás el Banco Central comenzó a pedir a las entidades que regula toda información que tengan sobre clientes proveedores de servicios de criptoactivos, ya que no hay en el país un registro de estos operadores, y está procesando esa información para determinar de qué forma avanzar.
Aún así, la ausencia de regulación para la operación de criptomonedas es una constante en casi todos los países de Latinoamérica, lo cual dificulta el respaldo de las operaciones que se hacen en las plataformas de intercambio.
«Es un esfuerzo extra para las empresas que operamos en le región. Tenemos que hacer cosas que nadie nos pide y avanzar en procesos de seguridad informática para brindar seguridad y transparencia para que los usuarios, para que sepan que sus cripto están a salvo», dijo Borja Martel Seward, cofundador de Lemon Cash.
Desde la Cámara Argentina de Fintech aseguraron que están en contacto tanto con las autoridades monetarias como con legisladores nacionales, para generar un intercambio técnico y conocimiento en la elaboración de proyectos de ley para el sector.
«La vocación de construir un puente entre el sector público y el privado está embarcado», dijo Mariano Biocca, coordinador general de la Cámara.
El miércoles último el mercado mundial de criptomonedas registró un derrumbe en sus cotizaciones, luego de que el gobierno chino prohibió su operatoria por considerarla una actividad altamente especulativa.
Fuente: Télam