
Primera mujer al frente del ente que regula las telecomunicaciones y medios en Argentina. Es claro que hablamos del Enacom y más de uno dirá… bueno, hubo dos presidentes de ese Ente… Miguel de Godoy y Silvana Guidici. Claaaarrrrooo, pero estamos teniendo en cuenta los organismos preexisentes al «convergido» Enacom.
Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), parido por decreto, hijo no reconocido del Afsca (Autoridad federal de Servicios de Comunicación Audiovisual) y la Aftic (Agencia Federal de Tecnología de la Información y las Comunicaciones). Aftic y Afsca paridas por ley, aclaremos.
Nieto del Comfer (por parte del Afsca) y de la CNC, Comisión Nacional de Comunicaciones, (por parte de Aftic).
Este breve resumen del árbol genealógico tiene por objetivo demostrar que la historia del ente de comunicaciones es mucho más extensa que «el Enacom».
El caso es que Giudici fue la primera mujer a cargo del Enacom, cargo al que llega después de haber penado durante dos años para la redacción de un proyecto marco de comunicaciones convergentes que nunca vió la luz…(estoy muy obstétrica, tema para terapia).
Si, porque muchos recordarán el paso de Giudici por el Parlamento dónde ejerció su defensa constante de la libertad de prensa, pero pocos valorarán el trabajo realizado durante dos años o si quieren 24 meses, con la consulta extendida para armar el famoso proyecto de comunicaciones convergentes.
En esa etapa escuchó a propios y extraños, quienes coincidían con sus posturas y quienes no. Sin embargo, pese al trabajo realizado, a haberse ganado varios adversarios en el proceso… el proyecto nunca se escribió.
Apenas llegó a «gatear» como un informe y una lista de buenas intenciones que no se podían «articular».
Sin haber podido actualizar esta información, se sabe que Giudici hace buenos flanes y que el asado le gusta bien cocido. Madre de dos mujeres. Nació en San Telmo, creció en La Boca y su afiliación partidaria es a la Unión Cívica Radical.
Es de esperar, según radio pasillos en línea, que Giudici permanezca en el Enacom -si este mantiene su actual funcionamiento- como representante de la oposición. Un espacio en el que se sentirá mucho más cómoda, según dicen sus compañeros de espacio político.
Algunos prefieren pasar de largo que en encuentros internacionales para hablar de regulación, de como incentivar el despliegue de infraestructura, la funcionaria argentina hablaba de libertad de expresión. Algo que generaba estupor en algunos representantes de países y preocupación en otros. Como tampoco son tan lejanas una cosa de la otra, también hubo quienes forzaron (viene de forceps?) la vinculación de un tema con otro.
Previo a la función en el Ejecutivo, y mientras era diputada de la Nación creó la Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) que entre otras cuestiones, elaboró en el 2018 un informe para asegurar que el Ejecutivo había gastado formalmente menos plata en publicidad oficial en el 2017 que en el 2016. Los números daban que no, pero con el impacto inflacionario alcanzaba para decir que habían gastado menos.
Cabe aclarar que ya en ese momento la Jefatura de Gabinete, como garante de la transparencia, había restado de las funciones de la agencia Télam el tema publicitario, para mas tarde (2018) restarle también el de contralor. De modo tal que Jefatura se «autoregula, autoaudita y auto todo» en materia de pauta oficial, algo que estaría bueno que cambie en la próxima gestión.
Volvamos a Giudici. Además de Fundación LED; también fue tesorera de la fundación SUMA, la que conducía Gabriela Michetti y que se conoció por la investigación por el robo de dinero en efectivo en la casa de la vicepresidenta.
Giudici again.. Su paso por el Ejecutivo, en línea con el espíritu del lugar, será marcado por haber hecho mucho kilometraje o «millas», ya que varias veces recorrió el país, si contar las participaciones en eventos y reuniones internacionales.
Formalmente las recorridas eran impulsadas por la expansión de programas de inclusión digital, como la entrega de tablets a los jubilados.
Aun entre personas de su propio espacio político -dígase Cambiemos-, le critican a ella y al directorio en general del Enacom, definiciones e indefiniciones en materia de regulación de las comunicaciones y ni hablar sobre la implementación de decisiones políticas como la subasta de frecuencias 450.
Entre los más críticos a su acción frente al Enacom figuran los medios alternativos y comunitarios que cuestionan la asignación de los aportes no reembolsables del FOMECA.
Hasta aquí una parte. Ahora empieza otra historia… ponele.