Los organizadores del Mobile World Congress dieron a conocer el lunes un plan de salud y seguridad que, según dijeron, permitiría que la reunión se lleve a cabo en Barcelona este verano después de que se suspendiera el evento del año pasado debido a la pandemia del coronavirus, informó la Agencia de Noticias Reuters.

El evento más grande en el circuito de la industria de las telecomunicaciones contará con un concepto de «registro para ingresar» que limita el acceso al lugar a aquellos con una prueba COVID-19 negativa actualizada, respaldada por medidas de distanciamiento y saneamiento en el lugar.

Los organizadores están trabajando con el gobierno local, las autoridades sanitarias y los socios turísticos, como restaurantes y empresas de taxis, para minimizar el riesgo de infección en una de las primeras grandes ferias comerciales en volver a un formato «en persona» desde que la pandemia llegó a Europa un año atrás.

“Creemos que es hora de volver, con gran responsabilidad”, dijo Mats Granryd, director general de GSMA, la asociación de la industria que organiza el congreso.

«La industria necesita reunirse físicamente y seguir haciendo negocios», dijo a Reuters en una entrevista, y agregó que cerca de 80 de los 100 principales expositores se habían comprometido a participar.

La GSMA, que cuenta con 750 operadores de telecomunicaciones y 400 empresas de la industria como miembros, tuvo que eliminar el evento del año pasado en el último minuto después de que los expositores se retiraran en masa.

El Mobile World Congress suele atraer a más de 100.000 asistentes, lo que da un impulso de 500 millones de dólares a la economía de la capital catalana.

El evento de este año, retrasado cuatro meses de su fecha habitual, debería poder soportar alrededor de la mitad de ese número de asistentes después de un evento «híbrido» similar celebrado en Shanghai el mes pasado que incluyó un programa en línea.

«Estamos tomando todas las precauciones necesarias», dijo Granryd, señalando un régimen que requerirá que todos los asistentes proporcionen pruebas de un resultado negativo de covid para obtener acceso al predio comercial de Fira y realizar nuevas pruebas cada 72 horas.

El número de entradas se ha duplicado para permitir el flujo unidireccional de tráfico humano, mientras que la admisión será «sin contacto» a través de una aplicación de eventos que los visitantes pueden descargar en sus teléfonos inteligentes y que servirá como una insignia digital.

No habrá un tratamiento especial para aquellos que hayan sido vacunados contra COVID-19, dijo Granryd. La Unión Europea ha comenzado a trabajar en una forma de certificado de vacunación que podría facilitar los viajes, pero el acuerdo está lejos.

Fuente: Reuters

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