Permitir que millones de usuarios brasileños de WhatsApp, la aplicación de mensajería de Facebook, enviaran dinero de manera tan fácil como mandar un texto parecía una oportunidad dorada para la mayor red social del mundo.
La omnipresente aplicación de mensajería finalmente entraba al sector financiero con un servicio de pagos en la mayor economía de América Latina, luego de años de preguntas sobre cómo Facebook podría ganar dinero con ello.
El lanzamiento de junio, tras años de planificación, buscaba ser el piloto para una presentación a nivel global, pero ocho días después de su entrada en servicio, el banco central lo suspendió.
La sorpresiva decisión subraya los desafíos que Facebook enfrenta al intentar conseguir la aprobación de reguladores financieros y las complejidades que estos enfrentan al evaluar los riesgos de permitir que los gigantes tecnológicos, con sus vastas redes de usuarios, entren a su mundo.
En Brasil, también plantea preguntas sobre las comunicaciones en torno a su lanzamiento. Ejecutivos de WhatsApp y autoridades del banco central mantuvieron al menos tres reuniones en los 21 meses previos, incluidas dos en la semana previa al lanzamiento.
En la primera vez que habló en detalle sobre la decisión, el presidente del Banco Central Roberto Campos Neto dijo a Reuters que el regulador no había determinado cómo lidiar con el modelo de pagos propuesto -un nuevo fenómeno en Brasil, que no tiene un servicio de transferencia de dinero operado mediante una aplicación.
“Antes del lanzamiento, hubo una reunión en la que WhatsApp explicó n algo su plan, pero el banco central fue sorprendido por el lanzamiento el 15 de junio”, dijo en una entrevista.
El regulador, que dijo que nunca recibió una solicitud formal de lanzamiento, suspendió el servicio Facebook Pay el 23 de junio.
Campos Neto y otras autoridades dijeron que las preocupaciones se centraron en la competencia, la privacidad de los datos -no han entregado detalles- y las deliberaciones en curso sobre si Whatsapp necesita de una licencia como compañía que ofrece o coordina servicios de pagos.
WhatsApp dijo a Reuters que había respondido a las preguntas del banco central y había entregado el plan de lanzamiento durante las reuniones finales.
“Nosotros hablamos abiertamente sobre nuestros planes para llevar los pagos por WhatsApp a Brasil”, dijo. La compañía agregó que estaba profundamente preocupada por la privacidad de los usuarios, que los detalles financieros eran almacenados en una red segura y que tenía contratos de seguridad de datos con todos sus socios.
WhatsApp dijo que no quiere convertirse en una compañía de servicios financieros. Las instituciones financieras en Brasil están sometidas a requisitos de reservas de capital y estrictas regulaciones.
Como una forma de eludir eso, y dentro de las normas existentes, WhatsApp busca usar a Visa Inc y Mastercard Inc, que ya tienen licencias del banco central, para realizar las transferencias de dinero.
“WhatsApp nos contactó hace aproximadamente dos años para construir una solución de pagos y aportar facilidades a sus usuarios y también porque no quería convertirse en una institución financiera”, dijo el jefe de Visa en Brasil, Fernando Teles.
“EN FASE DE AJUSTE”
WhatsApp dijo que el servicio usaba las redes de pago de Visa y Mastercard, que son compañías reguladas en Brasil.
No obstante, Campos Neto dijo que el servicio de transferencia de dinero que brindaba la plataforma tecnológica nunca había existido en Brasil, por lo que el banco central aún no había decidido si WhatsApp en sí necesitaba una licencia.
“Vale la pena recordar que las grandes tecnológicas no están en el espacio de los pagos en gran parte del mundo”, dijo a Reuters el 8 de julio. “Así que aún estamos en una fase de ajuste de nuestras regulaciones”.
No es la primera vez que Facebook parece haber malinterpretado a los reguladores mientras busca entrar al mundo financiero. Hace un año, presentó planes para lanzar la criptomoneda Libra, pero enfrentó el rechazo de los bancos centrales.
En el mercado de pagos de Brasil el premio es grande, con transacciones por 1,8 billones de reales (336.860 millones de dólares) el año pasado.
En las etapas iniciales de su servicio, WhatsApp también buscaba usar una provisión en las regulaciones de pagos que permite a las compañías iniciar servicios sin una licencia hasta alcanzar los 500 millones de reales o 25 millones de transacciones en un período de 12 meses, según una fuente cercana a la compañía.
Eso también está dentro de las reglas. Sin embargo, la provisión, dijo Campos Neto, busca alentar a las pequeñas empresas a entrar al mercado y no a una red tecnológica gigante como WhatsApp con 120 millones de usuarios en Brasil.
“WhatsApp trató de sacar ventaja de esta norma, diciendo: ‘Comenzaremos con volúmenes muy bajos porque una vez que estemos en el sistema, será difícil sacarnos’”, comentó, agregando que la compañía buscó usar “un truco de volumen”.
El banco central cambió esta disposición el 23 de junio para permitirle suspender a las compañías cubiertas por ella.
Visa y Mastercard dijeron a Reuters que no notificaron al banco central que planeaban realizar transferencias para WhatsApp porque pensaban que ya tenían las licencias requeridas.
“No había una regla específica sobre los servicios de mensajería en el sector de pagos en Brasil, por lo que lo hicimos (la sociedad) cumpliendo con las reglas existentes”, dijo el presidente de Mastercard para el Cono Sur de América Latina, Joao Pedro Paro.
Fuente: Reuters