El tiempo es algo así como la variable más relevante en la mayoría de las situaciones… Cuánto falta? Cuándo llegamos? Hay tiempo para una más?
Sabemos cuánto tiempo falta para algunas cuestiones emblemáticas.
Por ejemplo, sabemos que las elecciones presidenciales en Argentina son el 22 de octubre. Ese es el límite del período del tiempo.
El tema está en cómo gestionamos ese tiempo.
Y si bien para las cuestiones prácticas y operativas podríamos utilizar soluciones como la presentada en estos días por la empresa Cegid, que lanzó Visualtime para la administración y vinculación de horarios y productividad entre otras funciones necesarias y pensadas para empresas de más de 500 empleados (por ahora)… no siempre la respuesta es la solución informática.
Digamos que en este tiempo que resta hasta las elecciones, en un repaso hecho por TelcosMedia las empresas enfrentan un parate. Una frenada de mano, un «pará a ver que pasa…». Y no sólo por lo que resulte de las elecciones, sino porque también están afectadas por el remolino entre SIRA, liquidación de divisas, aduana, etc., etc.
Y claro, es que una cosa es explicar el tiempo de demora a un actor que juega en la misma cancha que uno, y otra muy distinta explicárselo un proveedor del extranjero.
Y vamos que en insumos tenemos mucho que esperar del extranjero.
En particular en el mundo telco la espera hasta las elecciones se divide en dos tiempos.
La primera etapa va hasta el 29 de septiembre, fecha en la que las empresas TIC que quieran participar de la licitación de bandas para STEFI (como le llaman a 5G en el entrecasa).
Esta etapa ya arrancó, y ni bien empezó se tiñó de una variedad de operaciones y fake news como pocas hemos visto hasta ahora (y eso que hemos visto bastante).
Ya hablamos de los cruces de comunicados entre las tres grandes y el Enacom.
Cumplida esa fase formal, es tiempo de «interpretaciones» de la letra dura… sin mucho rigor semántico que digamos.
Por ejemplo…
Como dicen en el barrio… no es lo mismo «una choza chica en Capri» que un «Chica CapriChosa» 🤣.
Así que atentos. Si te dicen que el concurso de 5G dice que «para el primer año solo prevé la instalación de una antena con tecnología 5G en capitales de provincia y en las ciudades de Buenos Aires, Mar del Plata, Rosario y Bahía Blanca»….
….deberían decir que el pliego de 5G indica que los adjudicatarios deberán tener «En un plazo no superior a DOCE (12) meses: Operatividad del servicio de, al menos una ESTACIÓN BASE, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, capitales de provincia, las ciudades de Mar del Plata, Bahía Blanca y Rosario».
Gran idioma el nuestro… pero dejemos de lado algo tan sencillo como el «al menos»….
…porque además, cualquiera que haya leído un tantito sobre 5G sabe que el principal dolor de cabeza de las operadoras es que esta tecnología exige poner muchas más antenas de las que usa el 4G para poder dar servicio…
Sigamos con la fe de erratas…. (un servicio a la comunidad) ..
Si te dicen que segun la normativa el Enacom le exige a las empresa que «Al cabo de siete años solo se exigirá una antena en localidades de 30.000 habitantes, y una cada 20.000 habitantes en las localidades mencionadas»…
… deberían decir que tomaron el textual de la última etapa prevista en el cronograma de despliegue… y no te contaron que además de la etapa uno (la de 12 meses post adjudicación) hay 2, 3 y 4 etapas con obligaciones antes de llegar a la quinta.
Pasando en limpio … etapa 1 (12 meses): Operatividad del servicio de, al menos, una ESTACIÓN BASE, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, capitales de provincia, las ciudades de Mar del Plata, Bahía Blanca y Rosario.
Etapa 2 para un plazo de 30 meses… toca el tiempo de llevar operatividad del servicio de al menos una estación base en las localidades de más de 100.000 habitantes, y por las dudas «ampliar la cantidad de ESTACIONES BASE a una cada 100.000 habitantes, conforme el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas de 2022, en las localidades de la Etapa I».
Pasados los 48 meses… en la etapa 3, toca el tiempo de llevar operatividad a localidades de más de 50.000 habitantes, no incluidas en la etapa I y II. Además de «Ampliar la cantidad de ESTACIONES BASE a una cada 50.000 habitantes, conforme el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas de 2022, en las localidades de las Etapas I y II».
Para la cuarta etapa… (vamos que ya van 66 meses desde la adjudicación), la operatividad debe estar en al menos una ESTACIÓN BASE en localidades de más de 30.000 habitantes. Además de «ampliar la cantidad de ESTACIONES BASE a una cada 30.000 habitantes, conforme el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas de 2022, en las localidades de las Etapas I, II y III».
Y finalmente, a los 7 años u 84 meses, ahora sí llega e turno de la Etapa 5, cuando las adjudicatarias deberán «ampliar la cantidad de ESTACIONES BASE a una cada 20.000 habitantes, conforme el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas de 2022, en las localidades de la Etapa I».
O sea que la lectura de las obligaciones de cobertura es un «piquín» distinta a la interpretación precitada.
Pero como para «clarificar la realidad» hay más gente de la necesaria… salgamos de acá.
Mientras las empresas se debaten entre presentarse o no a la licitación (y conste que no se ve ninguna cautelar en las inmediaciones), transitamos esta etapa preelectoral con todos los vaivenes habituales.
Y seguimos adelante… por lo menos hasta la semana que viene 👋🏼