Argentina 2023, año electoral, FMI encima y con «sorpresa» electoral mediante, el Ente Nacional de Comunicaciones aprobó el concurso para la licitación del 5G.
Hola, ¿sr. Juez?
Como jugadores en la cancha, precalentando y elongando, con el calendario en la mano, las empresas encontraron que su pedido de postergar la licitación al próximo gobierno no prosperó.
Así que con la resolución 1285 publicada, todos los equipos de ingeniería y de Legales se pusieron en marcha, con miras a llegar al 29 de septiembre.
Es que en este día, el que no se anotó ni presentó la oferta técnica para el uso de un bloque de frecuencias de la banda de 3.500, queda fuera de juego.
Así es. Calcularon bien. Las ofertas técnicas deberán presentarse antes de las elecciones generales presidenciales que son el 22 de octubre.
Las ofertas técnicas serán preclasificadas por Javier Domínguez, Guillermo Montenegro, Verónica Paola y Pablo Hernán Salas, quienes fueron designados para esta tarea.
Las ofertas que superen esta evaluación participarán de la subasta, cuya fecha está entre el 29 de octubre y «los primeros días de noviembre», según insistió el titular del Enacom, Claudio Ambrosini, en las diferentes entrevistas que concedió en estos días.
La indefinición de la fecha tiene que ver con los idas y vueltas, consulta va, respuesta viene, que implica todo proceso licitatorio.
Y sí. Otra vez calcularon bien los tiempos. Si más o menos todo sale bien, la subasta se realizaría antes de la fecha prevista para la segunda vuelta -de ser necesaria- para definir al nuevo Gobierno para la Argentina.
Y digo esto sin darme cuenta que en terminos prácticos a la masa de usuaries/consumidores/ciudadanes la fecha de la subasta no altera en absolutametne nada su día a día.
«El pueblo argentino es un hacedor de hazañas, y nunca nada, pero nada nos fue fácil», reza un video de campaña de estos días… y casi casi… que se aplica la frase para el sector de cara al 5G…
Hay 17 empresas en condiciones de presentarse a la subasta en la que ,finalmente, tres y sólo tres podrán hacerse de un lote de 100 Mghz cada una, por la módica suma de US$ 350 millones, pagaderos en los siguientes diez días en la misma moneda o en pesos al tipo de cambio oficial del cierre del día hábil anterior al de la subasta.
Asimismo, ya en la resolución queda establecido que cuando la prestadora de comunicaciones 5G supere un 50% de clientes con tecnología 5G, deberá impulsar planes especiales para los sectores sociales más vulnerables.
¿Dije que el voto no fue unánime a favor de la licitación de 5G? No, claro, lo dejé pasar. Es que como las reglas de la más vieja política indica, el opositor hará su juego para oponerse, aún cuando crea que algo es bueno para la sociedad que representa.
Y al fin y al cabo, estamos inmersos en una campaña electoral.
Y como el movimiento se demuestra andando, la reunión del directorio no se agotó en la votación para el concurso licitatorio de 5G.
También se aprobó la más anunciada entrega de un bloque de frecuencias de esta misma banda a la empresa Arsat.
«La decisión de asignar directamente a Arsat una porción de espectro radioeléctrico es 100% legal», nos dijo el coordinador de Asuntos Técnicos del organismo, Diego Leiva.
Esta porción de espectro será para un plan estratégico de conectividad federal que deberá diseñar el principal accionista de la empresa…. o sea, la Jefatura de Gabinete, que tiene el 98% de las acciones de Arsat.
Esta decisión fue cuestionada por los referentes de la oposición. Y una vez más señalan la posibilidad de que Arsat se vuelva un competidor para el sector privado.
Ideologías aparte, Arsat es una empresa estatal, y desde su creación, ante cada evolución surgen los fantasmas de la competencia con el sector privado.
Digamos todo, que Arsat compite con las empresas privadas en el segmento mayorista de las comunicaciones, las mismas que en algún tramo de la red se enlazan con la firma estatal para no duplicar redes.
En definitiva, lo verdaderamente importante es que el servicio llegue a los usuarios.
Y si de 5G hablamos, que llegue a la industria para que sea 4.0 real; al mercado de la medicina, la inteligencia artificial, la big data de cada día.
Y para las ciudades inteligentes, los vehículos auto-conducidos, y toooodo lo que se les ocurra en el camino.
Pero vamos paso a paso, que ya dijo don Telecom o don Roberto Nóbile, que desde la licitación hasta el despliegue, habrá al menos unos dos años de distancia.
Y el que avisa no traiciona….
así que aviso que este equipo de trabajo descansará unos días.. no muchos, los suficientes.
En fin.. Arrancó 5G, ¿te vas a quedar abajo?
Hasta la semana que viene.