La empresa estatal Arsat invirtió en los últimos tres años US$30 millones en la actualización de la Red Federal de Fibra Óptica (REFEFO), lo que permitirá incrementar y asegurar la conectividad en todo el territorio nacional durante la próxima década, informó la Agencia de Noticias Télam.
«Desde la pandemia el consumo de datos se fue incrementado y llevaron la red a un nivel de saturación; la actualización que hicimos y que completaremos en tres semanas asegura una red que podrá responder a la demanda, una red por 10 años», dijo el presidente de Arsat, la empresa estatal de soluciones satelitales, Facundo Leal.
La red federal de fibra óptica, con sus 34.000 kilómetros iluminados recorre de forma troncal todo el país, lleva internet en modo mayorista a cientos de pymes, cooperativas y también grandes empresas de telecomunicaciones, que llegan con sus propias redes a los hogares de los usuarios.
Actualizar la red requirió una inversión de US$30 millones y «no era un desafío simple» ya que cambiaron los proveedores de equipos, tanto para el «corazón» (core) del mismo, como para las placas que se colocan en los diferentes tramos.
Una vez finalizada esta actualización, Arsat podrá entregar a las empresas capacidades de 100 Gbps.
La red fue cambiando respecto a cómo se planificó inicialmente en el año 2010.
«Desde Arsat ya estamos planificando ampliar los servicios y proyectando qué tipo de demanda tendremos en los próximos años», dijo la gerente de corporativa de la firma, Anabel Cisneros, durante un contacto con la prensa.
Cómo ejemplo de la proyección de la demanda, Cisneros indicó que en la actualidad la red puede hacer el transporte de retorno móvil (backhold) para redes de 2, 3 y hasta 4G.
De cara al futuro cercano, «tenemos que prepararnos para 5G», acotó Cisneros.
El equipo gerencial de Arsat remarcó también los avances realizados en la red de televisión digital abierta (TDA), que con una inversión de US$ 3,5 millones logró renovar las 100 torres para asegurar la cobertura sobre el 83% de la población.
Entre otras inversiones, Arsat recuperó decodificadores que quedaron de remanente de gestiones anteriores y con miras a «reactivar la distribución de satelital», firmaron acuerdos con el Ministerio de Desarrollo Social y con provincias como Salta, Santiago del Estero, Tierra del Fuego, La Rioja, entre otras.
Estos decodificadores son para quienes tienen televisores que fueron fabricados antes del año 2014, o para aquellos que están fuera del área de cobertura terrestre de la TDA.
También destacaron el trabajo realizado en el data center de Arsat, que tiene una de las máximas certificaciones a nivel global, Tier3, y que ha ampliado su cartera de clientes que ahora se compone un 85% por sector público y 15% por el sector privado.
En el data center se trabaja sobre la creación de una nube híbrida dónde localizar datos, y se encaró la política de «descentralización» con la adquisición de un nuevo predio en Bariloche.
En el territorio rionegrino se instalará el primer data center fuera del que existe en Benavidez, en la provincia de Buenos Aires, con un espacio de 12.000 metros cuadrados.
«Arsat es una empresa autosuficiente», dijo Leal para remarcar que tanto para el Data Center como para los satélites en uso «la exportación de servicios es clave».
En el caso de los satélites, al Arsat 1 y Arsat 2 puestos en órbita en los años 2010 y 2015, respectivamente, se suma ahora la contratación por 42 meses de la capacidad del satélite SES17 que opera en la banda KA, la misma en la que operará el ArsatSG1 cuando esté en órbita en el 2025.
«Todos estos proyectos buscan cerrar la brecha digital»; remarcó Leal, cuya empresa acordó la conectividad de los centros de atención de salud primaria en todo el país, así como de 54.000 escuelas.
Fuente: Télam